Volver a Pastar

En nuestra vida cotidiana, es común quedar atrapados en el estrés, rumiando pensamientos y preocupaciones incluso después de que la causa del malestar haya desaparecido. Los caballos, en cambio, nos enseñan una lección valiosa: una vez que el peligro ha pasado, simplemente vuelven a pastar.
La Respuesta Natural al Estrés
Los caballos, como animales de presa, están diseñados para detectar y reaccionar rápidamente a amenazas. Su sistema nervioso se activa cuando es necesario, permitiéndoles huir si perciben peligro. Sin embargo, a diferencia de los humanos, cuando la amenaza desaparece, ellos no quedan atrapados en la ansiedad ni en la anticipación del peligro. Simplemente vuelven a su estado natural de calma y conexión con el presente.
El Contraste con los Humanos
Nosotros, en cambio, tendemos a quedarnos en estado de alerta, reviviendo mentalmente lo sucedido o preocupándonos por lo que podría venir. Nuestro sistema nervioso a menudo se queda atrapado en la activación, dificultando la recuperación emocional y mental. Este patrón nos impide disfrutar del presente y desgasta nuestro bienestar.
Lo que Podemos Aprender de los Caballos
- Reconocer la señal de peligro, pero no quedarnos atrapados en ella. Los caballos responden al estrés cuando es necesario, pero luego lo liberan.
- Volver a la calma de manera natural. Practicar técnicas de respiración y mindfulness nos ayuda a hacer lo mismo.
- Escuchar el cuerpo. Los caballos confían en sus sensaciones y estados internos, algo que también podemos aprender a hacer.
- Vivir en el presente. En lugar de quedarnos en pensamientos del pasado o preocupaciones del futuro, podemos entrenarnos para regresar al aquí y ahora.
Observar a los caballos nos recuerda la importancia de soltar el estrés cuando ya no es útil y regresar al presente con serenidad. En nuestra vida, podemos aplicar esta sabiduría practicando la autoregulación emocional y adoptando hábitos que nos ayuden a soltar y avanzar. Así como los caballos vuelven a pastar, nosotros también podemos aprender a regresar a la calma y disfrutar del momento presente.